Minerales que provienen de la República Democrática del Congo y los países que la circundan (República del Congo, República Centroafricana, Angola, Zambia, Sudan del Sur, Tanzania, Uganda, Ruanda y Burundi) localizados en el centro de África, y conocidos como países cubiertos.

Las ganancias del mercado de los minerales de conflicto son utilizadas para el financiamiento de grupos armados que operan en la región, y que han utilizado la minería como fuente de ingresos, explotando y esclavizando a los pobladores.

Los minerales de conflicto incluyen:

• Casiterita (oxido de estaño; usado en soldadura de aparatos electrónicos, recubrimientos y estabilizador de plásticos).
• Coltan (Columbita-Tantalita; usado en la manufactura de aparatos electrónicos), Wolframio (mineral de tungsteno utilizado para cableado y soldadura de aparatos electrónicos).
• Oro (usado en electrónica y joyería).

Las industrias que potencialmente se ven afectados por el consumo de minerales de conflicto abarcan: Automotriz; aeroespacial y defensa; telecomunicaciones; tecnología; dispositivos médicos; manufactura de herramientas, joyería y equipo deportivo, y productos de consumo como alimentos enlatados. La industria de la información y telecomunicación es el mayor consumidor de tantalio en el mundo (50 al 60% de la producción mundial), además de consumir el 26% de la producción de estaño y el 9% de la producción oro.